Apenas pisó el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, ante una cantidad de fotógrafos, periodistas y curiosos afirmó: “Esta es una pelea en donde va a ganar el más inteligente. Y ese soy yo”.
El bonaerense, quien conquistó el título en septiembre pasado, cuando venció en Las Vegas al mexicano Julio César Chávez Jr., llegó procedente de Madrid, en vuelo de la compañía Iberia, vestido con un saco negro y una remera blanca.
Lo acompañaron su técnico Pablo Sarmiento y un dilecto grupo de colaboradores, entre los que también estaba la doctora Patricia Bordón.
Martínez dijo: “Ojalá pueda ganar por nocaut. Para mi rival será una aventura muy importante. Espero que se vaya lastimado de la cancha de Velez”.
“Estoy apenas un kilo y medio arriba de mi peso habitual. No voy a tener problemas”, el peso lo tiene que redondear en los 72,574 kilos, que son los límites de la categoría.
El boxeador, de 38 años, abandonó el aeropuerto en un micro de la empresa Flecha Bus, escoltado por cuatro motos de la Policía Federal, y se dirigió hacia el Sheraton Hotel de la zona de Retiro, donde establecerá su campamento, previo a la pelea del sábado ante el inglés Murray en la cancha de Vélez.
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